“El universo sin un comienzo tiene sentido”
Con esa frase Gonzalo Palma, cosmólogo teórico abrió un debate en torno a las reveladoras teorías que actualmente baraja la ciencia con respecto al origen del universo. Acompañado por Max Bañados, físico experto en relatividad, conversaron con Vivian Lavín sobre sus estudios para desentrañar las lógicas de la expansión cósmica.
La observación del universo ha sido desde la antigüedad constante materia de estudio e investigación científica por parte de casi todas las civilizaciones. La pregunta central es porqué hasta el día de hoy se siguen invirtiendo millones en la instalación de centros de observación radio- telescópica o preparando misiones de exploración espacial que tienen como fin explorar más allá de los límites que se presentan como tangibles en este, nuestro planeta tierra.
Y la respuesta siempre roza los límites de la ciencia para indagar en cuestiones más filosóficas que tienen que ver con la persistente e ineludible pregunta por el origen de la existencia humana y la – no menor – inquietud acerca de los límites y posibilidades de vida dentro y fuera de este planeta. Aunque para los físicos Gonzalo Palma y Max Bañados invitados a este programa, las explicaciones sobre el "origen" entregadas por la ciencia deben siempre correr en un cauce paralelo a las brindadas por la fé, lo que en ningún caso las haría excluyentes sino que incluso podrían adquirir un cariz complementario.
Gonzalo Palma, cosmólogo teórico con entrenamiento en física de partículas y altas energías, conversó con Vivian Lavín acerca de los mecanismos y herramientas de las que se vale la ciencia para hacer sus observaciones: "nosotros usamos como herramienta básica --la luz que nos llega-- y desde allí observamos el universo. Básicamente la luz lo es todo para nosotros y en la medida en que intentamos observar más profundamente hacia el pasado y por lo tanto más lejos - porque la luz se demora en viajar hasta nosotros- entonces estamos observando el principio de los tiempos. Dado que la información viene viajando hace muchos miles de años, podemos escarbar y observar, por ejemplo, lo primero que existió: qué es el Fondo de Radiación Cósmica. Esto es un baño de luz que permea todo y fue generado en una época bien específica del universo cuando éste tenía más o menos 380 mil años de edad (actualmente tiene 14 mil millones de años)".
A esto Max Bañados, físico teórico experto en relatividad general, agregó: "los astrónomos actuales no sólo detectan a través del ojo, sino que también a través de otro tipo de instrumentos pues hay nuevos telescopios que son los radio telescopios que reciben radiación electromagnética de un tipo o de otro tipo. Los astrónomos ya no sólo miran con los ojos -por supuesto que hay astronomía visible y todavía es muy importante-, pero también hay telescopios en los que el ojo humano no detecta nada de lo que el aparato está recibiendo. Eso tiene que verse a través de un computador. Por ejemplo en el Proyecto Alma se reciben radiaciones que el ojo humano no puede ver, pero que evidentemente está ahí y es muy importante detectarlas. Cuando la gente comenzó a ver estas zonas del espectro que antes no eran visibles, apareció un universo muy distinto al que se veía con el ojo desnudo. Hubo que rearmar el universo con esa nueva información".
Según ambos científicos no hay una teoría física que pueda abordar de forma tangible lo que pasó al comienzo: "lo único que sabemos es que hay puntos que se están alejando, no tenemos una especie de sentido extrasensorial para saber que está más allá de ese espacio", enfatiza Bañados. Para la ciencia lo único que se tiene son predicciones teóricas a partir de esas observaciones que vienen dadas a través de una ecuación. La observación principal que se tiene es que el universo se está expandiendo y por lo tanto, cuando a través de las ecuaciones se trata de reconstruir el pasado, se sabe que en algún momento toda esta materia estuvo junta hasta que vino el gran estallido que conocemos como Big Bang. Según Palma, el estudio del universo y las investigaciones de cosmología se vuelven mucho más interesantes y nutridas cuando se comienza a cuestionar ese cuadro y observar las características de dicha expansión en un modelo que científicamente se denomina Inflación Cósmica. Los estudios a partir de Hawing ponen en jaque el principio de singularidad cósmica que señala que en un origen toda la materia estaba comprimida en un estado de densidad infinita. Los estudios sobre las características de dicha expansión indican que probablemente este universo no tuvo el comienzo que creemos que tuvo - que sería esta gran explosión- y que hubo un evento previo que tomó lugar antes de eso que hoy llamamos "inicio".
Einstein predijo la singularidad, sin embargo lo que la ciencia puede ver empíricamente hacia atrás es hasta 380 mil años de edad, es decir el Big Bang es simplemente una predicción teórica que viene dada a través de una ecuación. Indirectamente se puede ir más adentro pero sólo a través de cálculos matemáticos. En palabras de Bañados: "Nadie cree en su sano juicio, ningún astrónomo, ni ningún matemático ni ningún físico cree que esa singularidad realmente exista, y todos esperamos que algún día haya una teoría más completa que de alguna forma resuelva eso. Stephen Hawing tiene una teoría bien bonita que se llama la Teoría sin Bordes, que dice que esta gran explosión tal vez no ocurrió. En particular yo creo que no ocurrió, esa es también mi hipótesis de trabajo".
Para estos profesionales, la idea de que el universo siempre ha estado aquí ha ganando fuerza en gran parte de la comunidad de cosmólogos, sobre todo en las generaciones más jóvenes. Para ellos, de alguna forma un universo sin comienzo tiene sentido lógico de acuerdo a las observaciones que se rescatan a partir de su lógica de expansión. El modelo alternativo al que se refirieron los físicos invitados fue el de la inflación cósmica, como un conjunto de propuestas que en el marco de la física teórica explican la expansión ultrarrápida del universo en los instantes iniciales y resuelven el llamado problema del horizonte. Estas teorías fueron mencionadas por primera vez por el físico y cosmólogo estadounidense Alan Guth en 1981 y sugieren que hubo un periodo de expansión exponencial en el universo muy pre-primigenio. Si bien los invitados dieron pistas generales sobre la estructura base de estas teorías, aún hay mucha investigación de cálculo en este campo que es muy difícil trasladar a palabras.
Para entregarles a ustedes más detalles sobre ésta y otras teorías, compartimos el link con la entrevista completa que le hiciera Vivian Lavín, donde además -en su segunda parte - conversó con los astrónomos Sebastián López y Gaspar Galaz, quienes se refirieron al perfil humano y profesional de que quienes dedican su vida a desentrañar estos misterios del universo, tendiendo a ser en general personas de curiosidad insaciable, rigurosos y con un dejo de obsesivo para resolver los problemas que se les presentan.