Generosa escritura
Jorge Hernández es el que se pasea con el corazón bajo el brazo y no oculta que va sangrando. Porque hace cuatro años sufrió un infarto que casi le cuesta la vida pero eso no le ha impedido cultivar una disciplina que en él se ha convertido en un arte. Porque ha aprendido el esquivo arte de apreciar a los otros como dice Juan Villoro. Su estructura física es como su escritura: generosa y amplia, convirtiéndose en uno de los personajes ilustrativos de la escena literaria y periodística mexicana. Columnista sensible e infatigable, llega a presentar a la FIL de Guadalajara Solsticio de infarto, una selección de sus columnas semanales aparecidas en un período de casi 15 años en el periódico Milenio bajo el nombre de Agua de Azar, que es el de cada día que depara sorpresas. Este libro es una celebración y viene a ser una elegante verónica a la muerte que lo trató de seducir pero a la que terminó esquivando.
Los invitamos a escuchar esta interesante entrevista con Vivian Lavín.